EL CICLO «MELODRAMAS DEL CINE ARGENTINO» LLEGA A LA ENERC

Durante los sábados de septiembre, CINE.AR Play, la plataforma de video a demanda pública y gratuita del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), auspicia un ciclo de cine argentino en el microcine de la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (Moreno 1199), con entrada gratuita. Está conformado por tres películas que fueron restauradas bajo la mirada de reconocidos directores y que muestran el desarrollo del género entre los inicios del período sonoro y la década de 1950.

Historia de una noche (1941) de Luís Saslavsky, Safo, historia de una pasión (1943), de Carlos Hugo Christensen, y El último payador (1950), de Homero Manzi y Ralph Pappier, son las obras que integran este ciclo. Fueron donadas por Turner y han sido restauradas gracias al programa de recuperación del patrimonio «Cine argentino siempre», llevado adelante por CINE.AR y el INCAA.

La curaduría fue realizada por el Museo Nacional de Bellas Artes, la CINAIN (Cinemateca y archivo de la imagen nacional) y CINE.AR.

Las entradas deberán retirarse antes del comienzo de cada función, hasta colmar la capacidad de la sala.

PROGRAMACIÓN

Sábado 15 de septiembre

16 h. Historia de una noche – Duración: 93’ (Argentina, 1941)

Dirección: Luis Saslavsky

Un hombre con un secreto vuelve a su pequeño pueblo. La mujer a la que ha amado está casada, y ese otro hombre tiene graves problemas de dinero. El mosaico narrativo es complejo, pero Saslavsky lo resuelve de manera transparente: con objetos y personajes, crea una especie de danza totalmente precisa. Como todo paisaje social, este no carece de humor; como la vida real, tampoco carece de ironías. El personaje de Santiago Arrieta es mucho más que una figura sobre un lienzo: tiene la profundidad de los verdaderos seres humanos; lo mismo sucede con el de Pedro López Lagar. Los dilemas morales se resuelven con acciones y decisiones precisas, y no hay una sola secuencia estirada por demás. Saslavsky, que había trabajado en Hollywood y luego hizo una interesante carrera en Europa, maneja con soltura el plano americano y el montaje dinámico, así como la concentración temporal.

Sábado 22 de septiembre

16 h. Safo, historia de una pasión – Duración: 100’ (Argentina, 1943)

Dirección: Carlos Hugo Christensen

Es un clásico absoluto del cine argentino de los años 40. Basado en una novela de Alphonse Daudet, toma un tema bastante frecuente en la narrativa francesa del siglo XIX, el amor apasionado, carnal sobre todo, de un hombre joven por una mujer mucho mayor y experimentada, algo que aparece tanto en “Rojo y Negro”, de Stendhal, como en su casi parodia, “La educación sentimental”, de Gustave Flaubert. Aquí, esa pareja la componen Roberto Escalada y Mecha Ortiz, y en su época la película era más bien incendiaria (y también un enorme éxito de público). Christensen logra que la puesta en escena, precisa y por momentos barroca, establezca una perfecta simetría entre el ambiente y las emociones de los personajes, subrayando las oscuridades y la trampa social en la que se encuentran. El uso de las luces y de las sombras acompaña, musicalmente, la trama.

Sábado 29 de septiembre

16 h. El último payador – Duración: 90’ (Argentina, 1950)

Dirección: Homero Manzi, Ralph Pappier

Es cierto que todavía hay payadores, pero el verdadero “último” fue José Betinotti, un hombre que estableció un puente entre las maneras de la música popular del siglo XIX y las del siglo XX. Esta película –que tuvo más de una versión, hasta la definitiva de 1950– toma uno de los grandes temas del melodrama: la tensión entre el arte y la vida cotidiana. Hugo del Carril interpreta al cantante y payador, y gran parte de la historia gira alrededor de su canción “Pobre mi madre querida”, clásico del repertorio argentino que Carlos Gardel grabó en 1912. De hecho, la aparición fantástica de la efigie de Gardel hacia el final de la cinta marca de modo poético el fin del arte –y de la vida, lo mismo en este caso– de Betinotti.