ESTRENOS EN EL CINE GAUMONT EN COMPAÑÍA DE SUS REALIZADORES

Estrenos en el Gaumont con presencia de realizadores
 6 de junio de 2023.

El jueves 1 de junio se estrenaron tres documentales en el Cine Gaumont: Dos manos, todas las voces, de Leopoldo Obligado; Sebastián Moro, el caminante, de María Laura Cali; y El legado, de Rodrigo Demirjian. En los tres casos, las funciones de estreno estuvieron acompañadas por sus realizadores.

El primero de los estrenos fue el de Dos manos, todas las voces, un documental biográfico musical, histórico y político, sobre la vida de Hugo de la Vega, que a finales de los años 1960 con su Grupo Azul incorporó música popular y folclórica argentina al ámbito lírico y coral, que hasta entonces sólo permitía repertorios académicos. Cincuenta años después, Hugo de la Vega rearma su coro vocacional para dar un concierto compuesto por tangos, conviviendo con la inexperiencia de sus nuevos integrantes, lo que dificulta el objetivo. De una cruda niñez, pero con la aparición oportuna de un músico alemán que descubrió sus dotes musicales, Hugo cuenta con una amplia trayectoria que el tiempo parece reconocer. Ya en el final de su carrera, busca un discípulo a quien dejar su legado.

Leopoldo Obligado, director de la película, contó: “Hugo de la Vega, más que un recopilador sería un arreglador. De alguna manera, tiene que recopilar o buscar cierto material para después arreglarlo musicalmente. No es compositor, si bien tiene algunas obras compuestas; fundamentalmente, es arreglador. ¿Qué hace con esto? Toma alguna samba, alguna cueca, alguna chacarera conocida y le pone más voces para que puedan ser cantadas por los coros. A raíz de este trabajo, en el que se adentra y perfecciona con su Grupo Azul, como también con otros grupos como Buenos Aires 8 y Las voces blancas, es el primero que, de a poco, lleva a la música popular folklórica argentina y latinoamericana a integrar un repertorio de cámara”.

En la película participan Hugo de la Vega, Juan Brarda, Liliana Rodríguez, Lucía Pitta y la actual formación del Grupo Azul y el Grupo Cuchicheros.

Dos manos, todas las voces, obtuvo la Beca Creación del Fondo Nacional de las Artes y el Subsidio a la Posproducción de Documentales Digitales del INCAA; y fue seleccionado en el Laboratorio de Posproducción de Largometrajes del Festival de Cine de las Alturas, en 2022. 

Estrenos Gaumont 01/06/23 

Luego llegó el turno del estreno de Sebastián Moro, el caminante, un documental realizado por María Laura Cali que ahonda en la misteriosa muerte del periodista mendocino Sebastián Moro, editor de Prensa Rural en Bolivia. El periodista aparece golpeado y desvanecido luego de una noche en la que emprende una larga caminata; y muere con apenas 40 años. El misterio de su muerte se irá develando con la propia voz de Moro en sus audios de WhatsApp, en sus programas radiales y en los correos electrónicos.

A sala llena, María Laura Cali junto a Marcelo Schapces, productor del film, convocaron a diferentes representantes de entidades e invitados especiales: “Estamos acá parte del equipo, Gloria Beretervide, Marcelo Schapces, de Barakacine, Gime Baima, Buda Casa Productora, la gran Carmen Guarini, mi asesora integral, y Pedro Ligerón Vargas, de la Fundación Grupo Ukamau”, mencionó la directora. También convocó a los familiares de Sebastián Moro, que acompañaron el estreno: “Quisiera que vengan acá Raquel, Melody y Sabina, que están presentes, la familia de Sebastián. Sin ellas esta película no hubiera sido posible”. Y agregó: “Ante todo, agradecer la confianza que me brindaron para poder narrar esta historia, para que todo este equipo pueda narrar esta historia. A Marcelo (Schapces), de Baraka Cine, porque fue el primero que me apoyó”.

Schapces se sumó también a los saludos y agradecimientos, entre los que mencionó: “A la gente del SERPAJ, el Servicio de Paz y Justicia, a la gente del CELS, a la gente de SiPreBA, al sindicato de trabajadores de prensa que nos ha apoyado tanto, a la agrupación HIJOS Ciudad de Buenos Aires y a la CTA, que también nos está acompañando”. 

Antes de la función, la directora contó cómo conoció al periodista: “Lo conocí a Sebastián cuando me entrevistó en su programa Comunidad, en Radio Comunidad, porque yo estaba presentando mi anterior documental. Él era de Mendoza, yo nací en San Luis y entonces teníamos muchísimas cosas en común. En el documental que estaba presentando, yo relataba, entre otras cosas, los despidos en el Ministerio de Cultura; él había trabajado en Mendoza en Radio Nacional y lo habían puesto a trabajar en redes sociales y entonces se sintió humillado cuando borraron cerca de 250 trabajos de investigación sobre los juicios de lesa humanidad. El humillado decide renunciar y eligió Bolivia. Por eso lo vi allá, en La Paz, donde estaba empezando a trabajar como jefe editor de Prensa Rural, que cubre todas las problemáticas del campesinado, de los pueblos originarios. Seguía con ese ímpetu de cubrir todas las problemáticas de la gente que busca justicia y verdad”. 

También relató el efecto que causó la noticia en ella, y la decisión de hacer visible el reclamo de justicia por Moro que llevan adelante sus familiares: “Me conmovió mucho porque yo regreso entre el 19 y el 20, los días en se llevan a cabo las elecciones en Bolivia. Habíamos quedado en vernos en diciembre y no imaginamos nunca esto. Sí, sabíamos que la oposición estaba ya, de antemano, declarando un fraude y quería hacer lo imposible para anular esas elecciones, pero no imaginé la violencia y la manera en que querían silenciar a la población que apoyaba al gobierno de Evo Morales”. Y agregó: “La semana anterior estaban saqueando e incendiando todas las radios comunitarias, los canales de televisión. El propio Sebastián tuvo que sacar los equipos de Radio Comunidad. Cuando me entero de que lo encuentran desvanecido con golpes en su cuerpo y muere, me chocó muchísimo. Así fue que me contacté con Gloria Beretervide, que era la corresponsal argentina en Bolivia. Ella me contacta con la familia de Sebastián y les propongo contar esta historia. A Sebastián no le pueden anular la voz dos veces, primero en Mendoza, después en Bolivia”. 

La película fue presentada en la sección WIP del Festival La Mujer y el Cine (WIP), Premio de Posproducción de Sonido (2022), Vision Du Reel Market (2023).

Finalizando la noche, Rodrigo Demirjian presentó El legado, un documental realizado en coproducción entre Argentina y España que relata, en primera persona, el viaje de retorno que el director emprende a Buenos Aires desde Madrid para reconciliarse con la figura de su padre, el pintor Jorge Demirjian, que ha fallecido. Rodrigo tendrá que gestionar la inmensa obra que el artista dejó y tratar de recomponer una familia que ha quedado rota.

Para la presentación, el director estuvo acompañado por familiares y por la productora de la parte argentina, Carolina Álvarez. La productora expresó: “Es un día de muchos estrenos, lo sabemos, así que es un placer que hayan venido a la sala a acompañarnos. Yo estoy muy feliz de que Rodrigo y Flor nos hayan abierto esta historia tan íntima y tan personal. Creo que, en algún lugar, nos identifica mucho. Feliz también de que Nati (Natalia de la Vega, la otra productora argentina) sea parte de esta aventura. Quería agradecer a todo el equipo, que fue pequeño pero muy importante en el camino de hacer esta película. También al productor español, Omar Al Abdul Razzak, por convocarnos a ser parte de la película”.

El director invitó al público a dialogar sobre el film luego de la proyección: “Buenas noches. Sé que hay que decir algo, pero como la película todavía no se vio, invito a que primero la veamos y después hablemos”. 

Antes de la proyección, Rodrigo Demirjian contó: “En realidad, lo de reencontrarme con mi viejo obviamente fue algo simbólico, y la obra era lo que representaba a mi viejo. Yo la tenía muy mascada, la conocía mucho, excepto la de los últimos años, en los que estuve ausente. De hecho, no conocía lo que había hecho en los últimos quince años. Llevo veinte, en ese momento eran quince”. Luego, agregó: “Lo que más me llamó la atención era el material en 8 mm. Me parecía súper loco, porque yo nunca supe que él había hecho filmaciones. De hecho, en la película, él ironiza con el tema de cómo yo trabajaba con el video y cómo él hizo exactamente lo mismo. Era una cámara prestada. Él improvisó para ver qué podía hacer”.