La sala principal del Espacio INCAA Cine Gaumont agotó toda su capacidad para la avant premiere de “Familia sumergida”, la opera prima de María Alché, coproducida con Brasil, Alemania y Noruega y que viene de ganara el Premio a la Mejor Película Latinoamericana de la Sección Horizontes del Festival de Cine de San Sebastián.
Alché estuvo acompañada por los protagonistas Mercedes Morán, Esteban Bigliardi, Manuela Martínez y gran parte del elenco, técnicos y productores, además de varios invitados especiales.
“Me alegra mucho ver tanta gente querida y amada en esta sala. Esperamos el estreno con ansiedad, nervios y alegría. Encarar un proyecto propio es un trabajo muy grande, que implica convencer a las personas a sumarse y también desde lo creativo —explicó Alché—, porque desde que es una simple idea hasta que se convierte en una película pasa por mil procesos y etapas: de ser un guión hasta transformarse en algo más grande, que implica que se sume todo un equipo y filmar. El paso por San Sebastián fue un recibimiento muy lindo para la película, compartir la sección con películas latinoamericanas de algunos realizadores conocidos y queridos. Recibir un premio es un impulso para seguir haciendo esto, que es lo que amamos”.
También acompañaron a la directora distintas personalidades de la cinematografía nacional, entre los que se encontraban las actrices Julieta Zylberberg, María Onetto y Mercedes Scápola; y el director Benjamín Naishtat, entre muchos más.
Por su parte, Mercedes Morán contó que es una de las películas que más quiere, porque es la ópera prima de María Alché, y en la que tuvo el privilegio de verla nacer como directora: “creo que estamos frente a una gran realizadora; me ofreció un papel precioso que tiene todo el peso de la película, pero que navega por unos universos muy sensibles. Venimos de hacer un importante recorrido por diferentes festivales como Locarno o San Sebastián, con reconocimientos, críticas preciosas y los mejores comentarios, y ahora queremos saber qué pasa con ella en nuestro país”.
“Familia sumergida” transcurre en un verano en la ciudad de Buenos Aires, vacía y calurosa. La hermana de Marcela acaba de morir, y ella hace su duelo, mientras debe enfrentarse a desarmar esa casa. Un joven amigo de su hija aparece en su vida dispuesto a ayudarla, y su presencia da lugar a viajes y aventuras juntos. En sus confusos días, se entrecruzan personas y conversaciones de otro tiempo que la interpelan, mientras la inminencia de su vida cotidiana la acecha.
