CINEMATECA NACIONAL INCAA

La Cinemateca Nacional realiza una tarea estratégica con relación al patrimonio audiovisual de nuestro país, promoviendo el acceso a la diversidad cultural y su disfrute. Preservar la memoria, los hechos, percepciones y sentidos de lo que acontece es algo esencial ya que nos permite contextualizar nuestro presente, poner en perspectiva el futuro e identificar puentes de diálogo y convivencia a partir de la diversidad.

Coordina acciones en cuatro ejes fundamentales: estrategias y condiciones para el almacenamiento, preservación y conservación; gestión documental; y difusión y relaciones con la comunidad regional e internacional.

La existencia de la Cinemateca estuvo contemplada desde 1957, en el Decreto Ley Nº 62 que le dio origen al INCAA, y reafirmada en 1965 mediante una Resolución por la que el Organismo creó el Departamento de Cinemateca. En 1968 fue nombrada como Cinemateca Nacional por la Ley de Fomento de la Actividad Cinematográfica Nacional N° 17.741. Dicha Ley fue actualizada en el año 2001 mediante el Decreto 1248, que vuelve a mencionar su existencia y función.

 Actualmente, se dedica a la preservación, conservación interventiva, catalogación, gestión y difusión del acervo audiovisual que la Ley N° 17.741 le confía, además del material que recibe mediante donaciones.

El acervo de la Cinemateca Nacional está constituido, principalmente, por producciones audiovisuales realizadas con subsidios otorgados por el INCAA, donaciones y materiales de universidades y otros países. Preserva alrededor de 10.000 películas tanto en formato analógico fílmico y videográfico, como en digital.

El INCAA impulsa la difusión y divulgación del material que conforma la Cinemateca Nacional en diversos festivales, ciclos y muestras de cine, con fines educativos y culturales, tanto en el país como en el extranjero.

La preservación y el cuidado del patrimonio cultural es una política de Estado. La inversión y la voluntad política en esta materia son fundamentales para el fortalecimiento democrático y el pleno ejercicio de los derechos de los ciudadanos y ciudadanas a la memoria y a la identidad colectiva.